El divorcio supone romper el vínculo que une legalmente a dos personas. La disolución del vínculo matrimonia implica la pérdida de los derechos sucesorios y la pensión de viudedad.
Existen varias maneras de tramitar un divorcio, o bien de mutuo acuerdo o de manera contenciosa. Uno y otro tiene plazos distintos, costes distintos, características y procesos diferentes.
Divorcio de mutuo acuerdo
Es recomendable en tanto en cuanto es más rápido y menos costoso economicamente que los divorcios por vía contenciosa. Uno de los problemas de este divorcio es que tienen que estar de acuerdo en todas y cada una de las cuestiones a tratar: custodia de los niños, pensiones alimentarias, reparto de bienes…
Divorcio contencioso
Cuando se opta por esta vía, es el juez quien decide sobre las condiciones particulares del divorcio. Eso sí, primero escuchará lo que tienen que alegar cada una de las partes que acudirá al tribunal con su propia defensa legal.